30 de noviembre de 2010

LAS TECNOLOGIAS CONVERGENTES PISAN FUERTE EN LA RIOJA

158 firmas dedicadas a las Tecnologías de la Información y la Comunicación, ocho empresas nano y biotecnológicas y ocho centros de investigación avalan la apuesta de la Comunidad por las denominadas Tecnologías Convergentes. En los últimos años, estas nuevas materias han revolucionado los sectores tradicionales riojanos que han visto en ellas una forma de mejorar su competitividad. De hecho, la industria agroalimentaria y del plástico o las bodegas ya son sus principales clientes.

Nanotecnología, Biotecnología y Tecnologías de la Comunicación y la Información. Son palabras técnicas que a la mayoría de los ciudadanos pueden sonarle a chino. Sin embargo, sus aplicaciones prácticas pueden mejorar la vida diaria de cualquier persona, aumentar la competitividad de las empresas o crear nuevas oportunidades de negocio.
Son las denominadas Tecnologías Convergentes o NBIC (por las iniciales de sus nombres) , una nueva locomotora económica que ha cobrado un gran auge en La Rioja en los últimos años y que ha revolucionado sectores tan tradicionales riojanos como el vino, el calzado o el alimentario. Depósitos inteligentes y sensores de medición en el viñedo; zapatos antimicrobianos, antimanchas y sin olor; o bacterias y plantas que se comen la sal y los vertidos tóxicos del agua, son sólo algunas de las mejoras que han planteado tanto las empresas riojanas dedicadas a estas tecnologías como los grupos de investigación. Y es que los datos del Informe NBIC 2010, documento del Gobierno de La Rioja elaborado por RIAM I+L Lab, muestran que en La Rioja existen 158 firmas trabajando en TIC; ocho empresas nanotecnológicas y biotecnológicas; ocho centros tecnológicos y de investigación y 15 grupos de investigación de la Universidad de La Rioja.
Comunidad de referencia
Pero quizá la cifra más llamativa es la que se refiere a la nanotecnología: La Rioja es la segunda Comunidad, tras Madrid, en importancia en nanotecnología en el sector privado de España. Pero no es el único dato que avala el tirón de las NBIC en territorio riojano en los últimos años. La Rioja también es la segunda región española en el ‘ranking’ de crecimiento de personas empleadas en I+D, sólo superada por Cantabria. Así, en el periodo 2005-2008, los trabajadores de este sector crecieron al doble de la velocidad que en el conjunto de España: el 50% en La Rioja, frente al 23,4% de la media española. Aunque, eso sí, también cabe destacar que la Comunidad registra niveles bajos respecto a los números españoles. 1.322 personas empleadas en dichas actividades frente a un total de 215.676 personas en todo el país.
Invertir en innovación
Ni siquiera la crisis ha frenado el interés que suscitan estas tecnologías. Un baremo que se utiliza para evaluar este crecimiento es la inversión en innovación y desarrollo (I+D). Y el esfuerzo del gasto total en esta materia es importante, sobre todo en los últimos cinco años. Es más, entre 2005 y 2008 se ha registrado un crecimiento del gasto en I+D del 84%. Según el informe NBIC 2010, en 2008 el gasto ascendió a 81 millones de euros y esa cifra alcanzó los 90,2 millones de euros un año antes. Además, datos más recientes de la Agencia de Desarrollo Económico de La Rioja (ADER) señalan que el 30% de los proyectos que se han presentado a las ayudas (2.070) están relacionados con las tecnologías convergentes, tanto de empresas del propio sector como de los sectores tradicionales que las aplican. De esta forma, han aumentado los proyectos de I+D presentados por bodegas, sector del mueble, cerámicas y proceso constructivo o los proyectos relacionados con la energía. Se mantienen los presentados por el sector calzado, TICs y servicios. Por su parte, el apoyo del Gobierno regional en estas tecnologías se ha materializado en el III Plan Riojano de I+D+i, que pretende situar el gasto del PIB regional en las tecnologías emergentes en el 2% en 2011. Para ello, se otorgarán más ayudas a los proyectos relacionados con estas tecnologías. “Las firmas apuestan por las NBIC para conseguir competitividad y mantener empleo y, hoy, con la crisis para generarlo también”, señala Julio Herreros, subdirector general de Iniciativas y Transferencia de Tecnologías del Gobierno de La Rioja.
Demanda de futuro
Precisamente, de este estudio se desprende también cómo la convergencia de las TICs con la ‘nano’ y la ‘bio’ se perfilan como protagonistas de las futuras tendencias de la oferta. Las empresas demandantes de este tipo de tecnologías se concentran en cuatro sectores productivos en La Rioja: el 30%, en el agroalimentario; el 17,4% en TICs; el 16,5% en bodegas; y el 8,7% en el sector químico y plástico.